viernes, 9 de septiembre de 2011

Capítulo 51- "Tenerte entre mis brazos"

Narra Sophie 

Nota: Este capítulo se lo dedicamos a Andrea :) 

Tras pasar un par de semanas en aquella blanca habitación decorada con unas cuantas flores preciosas, sin poder moverme de la cama, por fín, había llegado el día en que podía volver a casa.    Mis padres me vinieron a recoger junto con Ryan y Lorena. El poco trato que he tenido estos días con Ryan, la verdad es que me cae muy bien, y mi hermana se merece estar con un chico como él, que la respete, y sobre todo que la quiera. Pero, faltaba alguien. Él. El rubio con un rostro perfecto: sonrisa perfecta, labios perfectos, cuerpo perfecto, y ¿esos ojos color miel? No se pueden describir... 
Llegamos a casa, y estaba algo nerviosa. Por lo que Lorena me había comentado, Ryan y Justin volaron hasta aquí con la mamá de este último, Pattie. No la recordaba, y eso me frustraba un poco, pero no perdía las esperanzas de poder recordar estos últimos meses. 
Entramos y un perrito muy bonito vino hacia nosotros. 
- ¡Qué monada! -exclamé agachándome un poco para poder cogerlo mejor. 
- Se llama Bella, y es nuestra perrita. -me informó Lorena, acariciándola. 
- ¿Qué? ¿De verdad? -mis ojos se abrieron. Ella sonrió y asintió. 
- ¡Ya habéis llegado! -una mujer de pelo castaño un poco más alta que yo con unos preciosos ojos, no sé si eran azules o verdes, se acercó hacia la puerta para recibirnos. Honestamente, no me fijé mucho en el tono de sus ojos. -Sophie. ¡Qué alegría que estés de vuelta! -me abrazó tiernamente. Supuse que era Pattie, así que le correspondí el cariño que me había brindado. 
Seguía sin ver al rubio. Por eso, me atreví a preguntar, un poco nerviosa. 
- Y, ¿Justin? -pregunté tímida. 
- Está en la playa, me dijo que volvería luego. Necesitaba coger un poco de aire fresco... -asentí un poco triste. De repente, varias imágenes pasaron rápidamente por mi cabeza haciendo que llevara una de mis manos hacia mi frente; Ryan, Lore, Justin y yo en una playa, jugando en el agua, y el rubio dándome un beso. *No, no. Tengo que estar loca* pensé, y negué con la cabeza volviendo a la conversación -Ryan, cariño, ¿por qué no lo vas a buscar? Ya está la comida, y de seguro no se ha percatado de la hora. Lo he llamado varias veces, pero tiene el móvil apagado -le comentó Pattie. 
- Sí, claro. -aceptó él. Le dio un beso breve a Lore, y se dirigió en busca del rubio, "mi novio". 

Narra Ryan 

Salí en dirección a la playa, en la que se encontraba Justin. No estaba muy lejos, así que tardaría como unos 15 minutos si me daba prisa. Verlo en su estado, me mata. Nunca había estado así por ninguna otra chica. Jamás había dejado todo por alguien. Pero al parecer, Sophie le había llegado muy hondo, y había cambiado las cosas que él no ha hecho por otra persona. Ahora, está destrozado, con el corazón hecho trizas. Primero, se entera de su accidente. Luego, la grave situación que atravesaba Sophie, y ahora... ella, no lo recuerda. No logra recuperar esos momentos que pasaron juntos, las caricias, los besos... el amor. 
Sentí la arena bajo mis pies. Busqué a Justin, entre la gente que se acomodaba en el lugar. Muchas sombrillas, demasiadas toallas, hasta que al final lo divisé. Sentado en la arena, jugueteando con ella, como si un reloj de arena se tratara. Deslizándola entre sus dedos una y otra vez. Me quité las vans que traía puestas, y comencé a caminar hacia él. Estuve de pie unos cuantos minutos, mas éste no se había percatado de mi presencia. Le toqué el hombro y me senté a su lado. Todo quedó en silencio, menos por los niños que gritaban y jugaban dentro del agua. Hacía calor, era un hermoso día para pasarlo en familia y en la playa, en el agua, nadando. 
- Ya ha llegado, ¿verdad? -preguntó él triste rompiendo el hielo. 
- Sí. Estamos esperando por ti para comer. -hice una pausa - Todos juntos. -lo miré, y pude notar que lloraba. -Vamos, amigo. Ya verás como todo se soluciona -lo consolé. 
Se levantó de repente con ira. 
- Es que, ¿no lo ves? ¡No me recuerda, Ryan! -su expresión contenía rabia, tristeza. -Esto es una puta mierda. Mi vida se está yendo al infierno. -se llevó sus manos a su pelo, echándolo para atrás. -La persona que más amo en este mundo no se acuerda de mí, de nuestro amor. -comenzó a contarlo con los dedos- Mi carrera, ¿qué es de mi carrera? Ya no queda nada. Mis fans me están abandonando, y eso es lo peor que le puede pasar a un artista. Y por último, estoy destrozado. No tengo fuerzas para nada...
-Ey, Justin. -me levanté y lo abracé. Comenzamos a caminar por la playa hasta que la dejamos atrás, y nos pusimos rumbo a la casa de Sophie. 

Narra Sophie

Estaban tardando mucho. *¿Les habrá pasado algo?* me pregunté para mi yo interior. Nosotros ya estábamos sentados en la mesa, esperando por ellos, para poder empezar a comer. Tocaron el timbre, y sin saber por qué, mi corazón latía un poco más fuerte. Toqué a Bella para intentar ocultar mi repentino nerviosismo. Lorena se levantó, y les abrió. Entraron en el comedor, solo Ryan y Lorena, Justin se quedó apoyado en el marco de la puerta de éste. Mis ojos se cruzaron con los de él, después de varios días. Le sonreí, pero él me evitó. Me sentí mal, y algo dentro de mí se tensó. 
- Si me disculpáis, no tengo hambre. Así que, me retiro a mi habitación, sino os molesta -se excusó Justin. 
- ¿Hijo? -lo llamó Pattie. -No puedes estar sin comer. Al igual que hoy, no quisiste almorzar. Tan solo te comiste un bollo en el desayuno, y ni hablar de la cena porque tampoco la tocaste. -se alarmó ella. Yo lo miré preocupada, pero ignoraba mis miradas. 
- Estoy bien, mamá. Tan solo quiero descansar. Ahora, si me disculpáis. -se retiró de la cocina, y se fue a la habitación dónde dormía. 
- No sé lo que voy a hacer con este chico. 
- Tranquila, mujer. Seguro que se le pasará. Ya le entrarán ganas de comer. -la animó papá. 
Pasamos un almuerzo tranquilo, aunque yo no sabía que decir. No pronuncié palabra. Mis pensamientos estaban en el piso de arriba. 
Cuando hubimos terminado, Lorena, Ryan y yo, ayudamos a las madres a recoger la cocina. Mientras que papá, se tumbó un rato a ver la televisión en el salón. 
- Ryan, ¿puedes llevarle esto a Justin? A lo mejor, le entra el apetito si ve la bandeja. -le preguntó Pattie, alzándole la bandeja. 
- Si quieres se lo llevo yo. -me ofrecí tímida. 
- No creo que sea buena... -empezó a decir Ryan, pero no pudo terminar puesto que Lorena le dio un codazo. -Está bien. -se resignó, y me dio la bandeja con un poco de comida. 
Subí las escaleras procurando no tropezar. Llegué hasta el cuarto de Justin. La puerta estaba entreabierta, así que, suspiré y valientemente entré en la habitación, despacio. El rubio, estaba acostado de cara a la pared, por lo tanto, no sabía si estaba dormido. No podía ver aquel rostro tan angelical. Si ya parecía un ángel traído del cielo cuando estaba despierto, no me quiero ni imaginar como se ve mientras duerme. Coloqué la bandeja que sujetaba con las dos manos en una mesita. Lo miré por última vez, y me dispuse a salir para dejarlo descansar. 
-Gracias. -me agradeció él con la voz queda. Me di la vuelta, y observé que seguía en la misma posición que antes, sin mirarme. 
- De nada. -logré decir. Quería marcharme, pero no podía. Sabía que él lo estaba pasando peor que yo al no conseguir recordar nada sobre los últimos meses de mi vida. Cerré la puerta tras de mí. 
- No te tienes por qué quedar. Estoy bien. -me aseguró. Me senté en la cama de al lado. 
- Lo siento. No debí tratarte así cuando te vi, pero es que.. me asusté -suspiré. -Mira, Justin. Todos dicen que eras importante para mí, por eso, he querido traerte algo de comer. Tu madre ha insistido y yo, pues.. me ofrecí. -se dio la vuelta. 
- ¿Y ya no soy importante para tí? -derramó unas cuantas lágrimas. Me quedé helada. Sin saber que decir. -Da igual. -contestó el por mí, volviendo a su posición inicial. Dándome la espalda. 
- ¿Por qué mejor no me cuentas cómo nos conocimos y esas cosas? -me acerqué a su cama, y me senté a su lado.-Quizás, de ese modo me puedas ayudar a recordar. -Eso pareció gustarle, ya que, apoyó su espalda contra la cabecera de la cama. Me miró fijamente. 
- ¿De verdad lo quieres saber? -sonrió. 
- Me encantaría. -le contesté tocándole la rodilla cariñosamente. Él pareció estremecerse ante mi contacto. Nuestro "primer" contacto. 
Empezó a contarme todo lo que habíamos vivido, sin olvidarse de ningún detalle. Yo asentía, mientras que él no paraba de sonreír, y a veces se emocionaba. Por dentro, yo me estaba muriendo por poder recordar, y me esforzaba, pero nada. No funcionaba, y eso me ponía de los nervios. Al terminar de contarme una risa salió de mi boca. 
- ¡Vaya! Pues sí que he tenido unos meses moviditos -reí. Él solo se limitó a sonreír. -¿Justin? -me miró fijamente, haciendo que mi mundo girara y el corazón latiera con fuerza. -¿En serio dejaste todo por mí? 
Asintió. Pasó su mano por mi pelo, y luego por mis mejillas. Colocó un mechón detrás de mi oreja, y me sonrojé. Con su mano en mi rostro, comenzó a acercarse a mí, quedando aliento contra aliento. Nariz contra nariz. Frente con frente. Miró mis labios una última vez antes de que sus labios se dirigieran a los míos. Fue un beso corto, pero bonito. Nos separamos, y ahora más que nunca estaba confundida. Él pareció notarlo, y se alejó un poco, pero seguíamos con los rostros muy cerca. Lo miré. Me miró, y esta vez fui yo la que le dio un beso más intenso, con más pasión. Justin no se negó, y comenzó a buscar mi lengua. La encontró y empezó a jugar con la suya, haciendo que éstas se unieran al ritmo de nuestros labios. *¿Qué narices estoy haciendo?* pensé aturdida. Me separé, y él me miró confundido. Rápidamente, me levanté y salí de la habitación. 
- ¡Sophie, espera! -lo ignoré, y corrí hacia mi habitación dejándolo con la palabra en la boca, y un beso marcado en sus labios. Cerré la puerta, y me tumbé en mi cama. Rocé mis labios con la yema de mis dedos, y de nuevo, unas cuantas imágenes rodearon mi cabeza. *¿Qué me está pasando con este chico? ¿Será amor? ¡Sólo lo conozco desde hace 3 días! No. No puede ser amor* discutían mi mente y mi corazón. Quizás, el amor que sentía por él antes de que me ocurriera el accidente, no se había desvanecido mientras estuve en coma. Tal vez, pese a que no lo conozca, siento lo mismo que antes... o puede que simplemente sean imaginaciones mías. 
Y así me dormí, pensando en esas cosas. 
Transcurrieron como 2 horas. Me desperté bostezando, me levanté y me arreglé un poco el pelo que se había alborotado. 
Puse un pie en las escaleras y vi a los chicos jugando a la play abajo, en el salón.                                                                                                                         Lorena estaba al lado de Ryan, viéndolos jugar. 
- Y, ¿los demás? -pregunté aún desde arriba. Los 3 me miraron a la vez. Lorena fue la que contestó mientras ellos devolvían su mirada al entretenido juego de pelea. 
- Fueron a cenar. Volverán más tarde. 
- ¡Guay! -bajé las escaleras y me senté al lado de él. Me miró apenado por lo que había pasado antes. Mi rodilla tocó con la suya y al encontrarse nuestras miradas, pude notar como un escalofrío recorría mi cuerpo. De los pies a la cabeza. 
- ¿Qué tal si pedimos una pizza? -propuso Lorena. 
- Por mi bien. -respondió Justin. 
- ¡Comida, comida! -exclamó Ryan, casi babeando. 
- Pareces el monstruo de las galletas. -reí. Justin sonrió y Lorena estalló en carcajadas. Normal en ella. 
- Bueno, voy llamando a la pizzería. ¿De qué la queréis? -preguntó Lorena con el teléfono en mano. 
- ¿Podemos pedir una de atún? ¿Por fa? -hice pucheros. Los demás rieron. 
- Vale. Y, ¿la otra? -volvió a preguntar Lorena dirigiéndose a los chicos. 
- ¿Sólo vas a pedir dos? -preguntó Ryan como si el mundo se hubiera acabado. 
- No seas glotón. -Lore le dio un golpecito en el hombro, y éste se quejó. 
- Bueno, en lo que os decidís, y pedís las pizzas, yo me voy a la ducha. -me levanté y subí las escaleras. Pude notar la mirada de Justin clavada en mi espalda. Viendo como subía, contoneando mis caderas. 
Me duché, y me relajé. Cogí una toalla, me sequé un poco el pelo, y me envolví en ella. Entré en mi habitación. 

Narra Justin

Entró en la habitación, y me quedé petrificado al verla de esa forma tan jodidamente sexy. Sus mejillas comenzaron a arder. Se puso roja. En cambio, yo seguía ahí parado con un charco a mi alrededor de las babas que caían por mi boca. Mientras tanto, mi zona de abajo se ponía dura como una roca, haciendo que el pantalón me hiciera daño. 
- Lo-lo siento.. -me disculpé avergonzado. -Tu hermana me mandó a por su portátil y me dijo que estaba en su cama, y.. aquí está -le dije nervioso, mientras ella no paraba de sonrojarse. Cogí el portátil, y me dispuse a salir. Dios, si no salía en ese momento de aquella habitación, notaría mi erección, y lo último que quería es que pensara que soy un pervertido o algo parecido. 
- Justin. -pronunció mi nombre y con eso hizo que mi miembro se endureciera más, teniendo ganas de desprenderse de aquella toalla que envolvía aquellos pechos tan bien formados, y jugar con sus pezones hasta que ella pidiera más, más, y... 
- ¿Justin? -chasqueó los dedos. Volví a la realidad. Me tapé con el portátil mi parte inferior disimuladamente intentando que ella no notara mi erección. 
- Eh, sí, perdona. ¿Qué decías? -reaccioné. 
- Quería hablarte sobre lo del beso... -agachó la cabeza tímidamente. 
- Lo sé, Sophie. No debí haberlo hecho. Necesitas tiempo, y...
- No, no. -me interrumpió.-me-me.. ha gustado. -tartamudeó un poco nerviosa y sonrió. Mi corazón paró de latir. 
-¿De-de verdad? -dudé. Dejé el ordenador de nuevo en la cama de Lorena, y me acerqué. Fuimos acercándonos más, hasta que la tuve a escasos milímetros de mi boca. 
- De verdad. -me afirmó. 
- Entonces... ¿puedo volver a besarte? -la pregunta le sorprendió, y sus mejillas volvieron a ponerse de un color rojizo. Asintió, y ese gesto fue lo que hizo que atrapara sus labios ferozmente. La apreté más contra mí. Al sentir mi miembro, soltó un gemido. No pude evitar reírme en sus labios. El beso cobró más intensidad, y la guié hasta la cama. Sin querer, caímos y nos quedamos yo encima de ella. Nos miramos a los ojos, y volví a besarla. Necesitaba sentirla, tocarla, besarla... hasta que nos cansáramos. Me quité la camiseta, y ella observó alucinada mis abdominales. Los tocó, mordiéndose el labio inferior, cosa que me volvía loco. Colocó sus brazos alrededor de mi cuello, y me pegó más contra su bien estructurado cuerpo. Me deshice de su toalla, quedando sus pechos al desnudo. Una delicia para mis ojos. Bajé mis labios a su cuello, mientras ella gemía de placer, y arqueaba su espalda queriendo más. Dejé su cuello, y pasé a besar el valle de sus senos. Su piel al sentir mi lengua en uno de sus pezones, se erizó. Cerró los ojos y se dejó llevar. Con la otra mano, masajeaba su otro pecho, tocándolo, sintiéndolo. Succioné su pezón dejándolo más hinchado de lo que estaba. Lo mordisqueé, jugué con el. Sabía que la estaba haciendo sufrir que me necesitaba dentro de ella, pero quería hacerla esperar y disfrutar del momento. Abandoné su pecho y deslicé mi mano por su feminidad. 
- Justin... -susurró gimiendo. -tócame.. -me pidió. 
- Tranquila, princesa. Lo pensaba hacer. -le di un beso en los labios, e introduje uno de mis dedos lentamente en ella. Comencé a mover el dedo en círculos haciendo que Sophie se pusiera más húmeda de lo que estaba. Luego, introduje otro más, y parecía que Sophie, pronto llegaría a un orgasmo aún sin estar dentro de ella. 
Ella, deslizó sus dedos por mi torso desnudo, y llegó hasta mi pantalón. Me lo desabrochó, y se dispuso a tocar mi miembro, el cual todavía estaba protegido por mis boxers, hasta que... 
- ¡Sophie, Justin! ¡Ya llegó la pizza! -nos gritó Lorena desde abajo. 
- Mierda. -me quité del cuerpo de Sophie, y ésta se ponía la toalla un poco avergonzada y con los labios hinchados, al igual que los míos. 
- Dios, que bien ha estado. -murmuré cerca de su oído. Se sonrojó. 
- Tonto... 
- ¿No te ha gustado? Dios, Sophie. Lo siento, en serio. No debí hacer esto... -me apené. 
- ¿Qué? No, no. A mi también me ha gustado. Ambos lo queríamos. -me calmó cogiéndome del brazo. 
Sonreí y la besé tiernamente. 
- ¿Podrías llevarle tu el portátil a tu hermana cuando bajes, por fa? -le pregunté mientras me ponía la camisa. 
- ¿Por qué no se lo puedes llevar tú? -me preguntó, poniéndose unas braguitas, lo cual hizo que mis ojos recorrieran su cuerpo entero deseándola aún más. 
- Verás... es que necesito una ducha bien fría. -señalé a mi miembro, que por poco y se salía del pantalón. Ella rió. 
- Está bien -continuó riéndose. Salí de la habitación y me dirigí al cuarto de baño. 

Narra Sophie 

Me puse el pijama. Unos pantalones cortos y una camiseta de asillas. Me peinaba mirándome al espejo y recordaba lo que había pasado hace tan solo unos cuantos minutos. ¡JODER! ¡QUÉ BIEN LO HACÍA JUSTIN! No habíamos llegado a nada más, pero estuvimos a punto... tal vez, nos descontrolamos demasiado, pero.. es que no me puedo resistir a sus caricias. Sabe como hacerme sentir una verdadera mujer. 
Escuché el ruido del agua proveniente del baño, mientras caminaba por el pasillo. Bajé las escaleras y ahí estaban Ryan y Lorena, comiendo pizza.
- ¡Dejad para los demás! -les grité. 
- Tenemos hambre, pequeña. -me contestó Ryan con la boca llena de comida. 
Cogí un trozo de pizza y me lo llevé a la boca. 
- ¡Sois unos glotones! -nos acusó Justin desde arriba. Tenía el pelo alborotado, y muchas gotitas caían por su torso desnudo. Me humedecí los labios, y él me guiñó un ojo. Al rato, llego a donde estábamos nosotros. Le hice un hueco, y me sonrió. 
Cuando terminamos de comer, Lorena y yo recogimos los platos y los fregamos. 
- ¿Ha pasado algo, Sophie? -preguntó curiosa. 
- ¿Algo de qué? -rodé los ojos. 
- Justin y tú, ¿qué habéis hecho allí arriba? -levantó las cejas. 
- Hablar... -mentí. 
- Sí, claro. Y yo soy tonta y me chupo el dedo. -me contestó sarcásticamente. 
- ¡Lore! ¿Me acompañas arriba? -le preguntó Ryan entrando por la cocina. 
- Voy, amor. -le dijo ella, terminando de lavar el último vaso. 
Ryan la cogió de la mano y subieron juntos al piso de arriba. 
- ¡Usad protección! -les gritó Justin. Me acerqué a su lado y él puso su brazo por mis hombros. -¿Quieres ver una peli? -me preguntó. Alcé la mirada, y lo besé. 
- Vale. ¿Cuál vemos? -sonrió maliciosamente- una de miedo, no. -lo fulminé con la mirada. 
- ¿Por qué? Venga, princesa, no te va a pasar nada si yo estoy a tu lado. 
- Deja el ego a parte, y veamos una de risa. 
- Está bien -suspiró y se levantó para poner una peli del género que yo le había pedido. Se volvió a sentar. 
- Te quiero -me susurró. Yo me quedé muerta. ¿Qué se supone que le tenía que decir? Ni yo misma sabía que estaba pasando. Notó mi preocupación. -Tranquila, esperaré a que me lo puedas decir. -me besó en la cabeza. Suspiré aliviada y me acomodé entre sus brazos. 
No recuerdo hasta que parte vi de la película. Lo último que recuerdo fueron sus brazos rodeándome haciéndome sentir segura, protegida, y mi cabeza en su pecho. Seguramente, me quedé profundamente dormida, en sus brazos. 

11 comentarios:

Love & Hope dijo...

Me ha encantadoooo!!! Gracias por dedicarme este cap. esta chulisimoooo! Es una de las novelas mas chulas que he leido me encantaa! enhorabuena por la noveeeee!!
PD: si no teneis a quien dedicarselo , a mi no dudeis que los leo siempre!! XD

«Snoui» dijo...

Madre miia; simplemente genial, me ha gustado mucho. Esta historia tendria que publicarse en un libro porque verdaderamente vale la pena leerlo. Gracias por publicar tan pronto; espero es siguiente ansiosa. BESOS

NuuriaBM(: dijo...

Oh dioss! He muertoo...me ha encantadoo :) Muchas gracias por seguir subiendo, no dejeis de hacerlo! 1beso guapaas :D

Rocío dijo...

¡Madre mía!Amo esta novela,me encanta.
Este capitulo me ha gustado mucho,haha.
Espero que subais otro capitulo pronto!
Siguiente!<3

Claudia dijo...

Diios miooooo! me ha encantado :') sinceramente.. vale la pena leer esta novela.. es tan aslñdkañlskdl no sé si me explico :$ Y la parte.. perver.. OH god *_* me ha gustado mucho enserio y mas si los subiis asin de pronto y asin de largos:$(L)
Siguienteeeee ! <3

Anónimo dijo...

oooh my bieber! me ha encantado *____* seguidla! :D

Anónimo dijo...

Siguiente yaaaaaaa x favor ke me muero x favor joderrrr enserio el corazon me va a mil x hora XD

M. dijo...

jodeer k pasadaaaaa!!!!! a estado genial =)

subid pronto xD =)

besitos ;)

Saraaa :) dijo...

siguiente esta geniaaaaaaal :)

LuciaYandelaJB dijo...

jajajajaja está chulisima enserio!! aunque se está convirtiendo un poco porno eh! jajajajaja pero es muy bonita enserio, tmb pienso que deberia estar en un libro!! es muy realista :)besos chicas!

Unknown dijo...

SIEMPRE LOS INTERRUMPEN CUANDO QUIEREN FOLLAR, TÍO, LA HERMANA ES UNA PESADA ¡¡QUE DEJE A SU HERMANA FOLLAR EN PAZ COÑO!!